“Aventuras a cuatro patas”, aún con redactores con un virus estomacal, quiere hoy traeros la tierna historia de una perra adoptada.
Leya, nuestra protagonista, fue abandonada con sólo dos meses de vida, sus comienzos empezaban mal con ningún hogar que la quisiera y respetara. Por suerte entre tanta maldad que hay en vuestro mundo de humanos, en los días de esta preciosa compañera llegó Isabel.
Esta humana, con cariño y dedicación, y con otros compañeros cuatro patas, acogió a Leya en su hogar, para curar esas heridas que no se van tan fácilmente… las heridas del maltrato. Esas que duelen hasta rabiar, esas que te llenan de miedo.
Esta maravillosa persona difundió su caso y entonces llegó ella: Marisol. Como el astro solar ha llenado sus días de luz y de esperanza, ella apostó por Leya, aunque no fuera la más fuerte ni la más valiente, ella vio en nuestra protagonista a la compañera perfecta.
No lo tuvo fácil: tuvo que acostumbrarse a cuatro gatos y uno más que tuvieron que curar, dejar de temer a los humanos masculinos que tantos recuerdos de dolor y sufrimiento le traían.
A día de hoy, seis años después nuestra amiga es feliz con sus cinco gatos de compañeros, a los que educa pero a los que ama; adora a los niños, está intentando superar algunos temores que aún tiene pero el tener buenos dueños hace que se sienta en un hogar más feliz.
Leya es la perra de la responsable de la página oficial ADOPTA-MADRID (http://www.facebook.com/group.php?gid=118165488212039&v=wall&ref=mf#!/pages/ADOPTA-MADRID/136557976354639?ref=ts) donde hay muchos casos como el suyo, de compañeros que buscan también una familia. Buscan la suerte que tuvo ella, ese final feliz.
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Lametazos
4 comentarios:
¡Que bonita historia!, Lo último que queda siempre es la esperanza y es lo más importante. Me alegro por Leya.
Qué bonita Leya! Qué historia tan triste y a la vez tan feliz. Es el ejemplo de que con cariño y paciencia, las heridas siempre se curan. Muchos lametazos.
No tengo mas q deciros salvo q gracias. Habeis hecho q me emocione. Os quiero guapos y me alegro muchiiisimo de haberos conocido.
A ver cuando podemos vernos en persona, porfa, estoy desenado conoceros a todos, tanto a los de dos como a los de cuatro patas.
Leya y los mininos os mandan lametazos y ronroneos. GRACIAS.
Marysol
Marysol gracias a ti, por dejarnos compartir una historia de esperanza. Por tu trabajo día a día por encontrar un hogar a cada compañero.
GRACIAS.
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